LA CONTEMPLACION

 

La oración es algo natural en el hombre, como hablar, o suspirar, o mirar,

o como el latir del corazón enamorado;

y en realidad es una queja y un suspiro y una mirada y un latido enamorado.

Uno puede comunicarse con la mirada, o la sonrisa, o los suspiros, o con actos.

Fumar puede ser también oración, o pintar un cuadro, o mirar el cielo, o beber agua.

Dios está en todas partes, aun en Broadway, pero su voz sólo se oye en el silencio.

La contemplación de Dios es una recapitulación y una síntesis de todas las

criaturas.

Todos los animales rezan también a su modo el padrenuestro.

El coro de las ranas y los grillos, un gallo que canta lejos, y todas las otras voces misteriosas del campo son otros Oficios, como el Oficio de los mojes; son también salmos en otra lengua; son también oración.

La santidad de Dios se manifiesta en todo, también a través de las pupilas puras de los cerdos.

La materia toda es limpia y santa, pues ha salido de las manos de Dios.

Todas las cosas irracionales son el deseo cumplido de Dios.

Las tardes y las noches son quietas y solitarias porque Dios las ha hecho para la

contemplación.

La existencia de todas las cosas es un beso de amor de Dios.

Debemos contemplar todas las cosas como símbolos y figuras, como fotos de Dios.

Dios ha querido que sus maravillas sean ordinarias, que todas las cosas provengan de sus causas y que las causas produzcan

sus efectos y que todo suceda naturalmente.

Todo lo ordinario es un milagro. Un ratón es un milagro, como dice Whitman.

La creación es un acto perenne y que está aconteciendo en cada instante ante

nuestros ojos . Estamos siendo creados a cada instante, sacados a cada momento

de la nada. El universo entero es un perpetuo milagro.

Para los que viven con Dios toda la vida es extraordinaria y está llena de milagros.

Toda obra de arte es también una alabanza a Dios.

Ernesto Cardenal

Vida en el Amor